Liturgia de las horas

Vísperas

V. Dios mío, ven en mi auxilio.
R. Señor, date prisa en socorrerme.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya.

HIMNO

Dios te salve, Anunciación,
morena de maravilla,
tendrás un Hijo más bello
que los tallos de la brisa. 

Mensaje de Dios te traigo.
Él te saluda, María,
pues Dios se prendó de ti,
y Dios es Dios de alegría.

Llena de gracia te llamo
porque la gracia te llena;
si más te pudiera dar,
mucha más gracia te diera. 

El Señor está contigo
aún más que tú estás con Dios;
tu carne ya no es tu carne,
tu sangre ya es para dos. 

Y bendita vas a ser
entre todas las mujeres,
pues, si eres madre de todos,
¿quién podría no quererte? 

SALMODIA

Ant. 1. Brotará un renuevo del tronco de Jesé, y de su raíz florecerá un vástago. Sobre él se posará el Espíritu del Señor. 

Salmo 112
ALABADO SEA EL NOMBRE DE DIOS

Alabad, siervos del Señor,
alabad el nombre del Señor.
Bendito sea el nombre del Señor,
ahora y por siempre:
de la salida del sol hasta su ocaso,
alabado sea el nombre del Señor.
 
El Señor se eleva sobre todos los pueblos,
su gloria sobre los cielos.
¿Quién como el Señor, Dios nuestro,
que se eleva en su trono
y se abaja para mirar
al cielo y a la tierra?
 
Levanta del polvo al desvalido,
alza de la basura al pobre,
para sentarlo con los príncipes,
los príncipes de su pueblo;
a la estéril le da un puesto en la casa,
como madre feliz de hijos.

Ant. Brotará un renuevo del tronco de Jesé, y de su raíz florecerá un vástago. Sobre él se posará el Espíritu del Señor. 

Ant. 2. El Señor Dios le dará el trono de David, su padre, y reinará para siempre. 

Salmo 147
ACCIÓN DE GRACIAS POR LA RESTAURACIÓN DE JERUSALÉN

Glorifica al Señor, Jerusalén;
alaba a tu Dios, Sión:
que ha reforzado los cerrojos de tus puertas,
y ha bendecido a tus hijos dentro de ti;
ha puesto paz en tus fronteras,
te sacia con flor de harina.
 
Él envía su mensaje a la tierra,
y su palabra corre veloz;
manda la nieve como lana,
esparce la escarcha como ceniza;
 
hace caer el hielo como migajas
y con el frío congela las aguas;
envía una orden, y se derriten;
sopla su aliento, y corren.
 
Anuncia su palabra a Jacob,
sus decretos y mandatos a Israel;
con ninguna nación obró así,
ni les dio a conocer sus mandatos.

Ant. El Señor Dios le dará el trono de David, su padre, y reinará para siempre. 

Ant. 3. El que era la Palabra substancial del Padre, engendrado antes del tiempo, hoy se ha despojado de su rango haciéndose carne por nosotros. 

Cántico Ef 1, 3-10
EL PLAN DIVINO DE LA SALVACIÓN

Bendito sea Dios,
Padre de nuestro Señor Jesucristo,
que nos ha bendecido en la persona de Cristo
con toda clase de bienes espirituales y celestiales.
 
Él nos eligió en la persona de Cristo,
antes de crear el mundo,
para que fuésemos consagrados
e irreprochables ante él por el amor.
 
Él nos ha destinado en la persona de Cristo,
por pura iniciativa suya,
a ser sus hijos,
para que la gloria de su gracia,
que tan generosamente nos ha concedido
en su querido Hijo,
redunde en alabanza suya.
 
Por este Hijo, por su sangre,
hemos recibido la redención,
el perdón de los pecados.
El tesoro de su gracia, sabiduría y prudencia
ha sido un derroche para con nosotros,
dándonos a conocer el misterio de su voluntad.
 
Éste es el plan
que había proyectado realizar por Cristo
cuando llegase el momento culminante:
hacer que todas las cosas tuviesen a Cristo por cabeza,
las del cielo y las de la tierra.

Ant. El que era la Palabra substancial del Padre, engendrado antes del tiempo, hoy se ha despojado de su rango haciéndose carne por nosotros. Aleluya.

LECTURA BREVE  1Jn 1, 1-2

Lo que existía desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto con nuestros propios ojos, lo que contemplamos y palparon nuestras manos: la Palabra de la vida (pues la vida se hizo visible), nosotros la hemos visto, os damos testimonio y os anunciamos la vida eterna que estaba con el Padre y se nos manifestó.

RESPONSORIO BREVE 

V. Ha brotado un renuevo del tronco de Jesé. 
R. Ha salido una estrella de la casa de Jacob. 
V. La Virgen ha dado a luz al Salvador.
R. Ha salido una estrella de la casa de Jacob. 
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
R. Ha brotado un renuevo del tronco de Jesé. 

CÁNTICO EVANGÉLICO

Ant. El Espíritu Santo vendrá sobre ti, María, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra. 

BENEDICTUS Lc 1, 68-79
EL MESÍAS Y SU PRECURSOR

Bendito sea el Señor, Dios de Israel,
porque ha visitado y redimido a su pueblo,
suscitándonos una fuerza de salvación
en la casa de David, su siervo,
según lo había predicho desde antiguo,
por boca de sus santos profetas.
 
Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos
y de la mano de todos los que nos odian;
realizando la misericordia
que tuvo con nuestros padres,
recordando su santa alianza
y el juramento que juró a nuestro padre Abrahán.
 
Para concedernos que, libres de temor,
arrancados de la mano de los enemigos,
le sirvamos con santidad y justicia,
en su presencia, todos nuestros días.
 
Y a ti, niño, te llamarán profeta del Altísimo,
porque irás delante del Señor
a preparar sus caminos,
anunciando a su pueblo la salvación,
el perdón de sus pecados.
 
Por la entrañable misericordia de nuestro Dios,
nos visitará el sol que nace de lo alto,
para iluminar a los que viven en tinieblas
y en sombra de muerte,
para guiar nuestros pasos
por el camino de la paz.
 
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.

Ant. El Espíritu Santo vendrá sobre ti, María, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra. 

PRECES 

Oremos con confianza al eterno Padre, que, por medio del ángel, anunció hoy a María nuestra salvación, y digámosle:
 
Derrama, Señor, tu gracia, sobre nosotros.
 
Tú que elegiste a la Virgen Maria para ser madre de tu Hijo, 
- ten piedad de todos los que esperan su redención.
 
Tú que por boca de Gabriel anunciaste a Maria el gozo y la paz, 
- otorga al mundo entero el gozo de la salvación y la paz verdadera.
 
Tú que, con la aceptación de tu esclava y con la acción del Espíritu Santo, hiciste que tu Palabra acampase entre nosotros, 
- dispón nuestros corazones para que reciban a Cristo como la Virgen María lo recibió.
 
Tú que miras a los humildes y colmas de bienes a los hambrientos, 
- da ánimo a los abatidos, socorre a los necesitados y ayuda a los moribundos.
 
Oh Dios, para quien nada hay imposible, el único que haces obras maravillosas, 
- sálvanos, cuando resucites a los muertos en el último día.

Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad  en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal. 

ORACIÓN

Señor, tú has querido que la Palabra se encarnase en el seno de la Virgen María; concédenos, en tu bondad, que cuantos confesamos a nuestro Redentor, como Dios y como hombre verdadero, lleguemos a hacernos semejantes a él en su naturaleza divina. Por nuestro Señor Jesucristo.

CONCLUSIÓN

V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén. 

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